David Rojo
Marea Rosa no es ni será un partido político, “porque el partido que los representa son las causas, el partido es México”.
De esta manera Marea Rosa ataja cualquier interpretación que podría venir en el inmediato futuro político del movimiento ciudadano.
La cuestión es si llegado tiempos electorales se mantendría en tal postura, más con la capacidad de convocatoria y movilización de lo que dejó constancia desde sus iniciales manifestaciones en defensa del INE y que concluirían en abierto pronunciamiento de Xóchitl Gálvez.
En un comunicado hecho llegar a la redacción de Los Cabos Extraordinario, Marea Rosa observó que el pasado dos de junio se llevaron a cabo las elecciones más importantes de México en la que las principales candidatas a la presidencia fueron mujeres; y de la cual resultó ganador nuevamente el partido político que representa el actual gobierno.
Por ello, se precisa que ante la intromisión político que se venía viendo durante este actual Gobierno, UNID@S preocupados ante la intentona oficialista de desaparecer al árbitro electoral en noviembre de 2022, los ciudadanos pasaron a la acción y la Marea Rosa apareció en la escena pública.
A partir de entonces –se indica– los ciudadanos se activaron para defender al INE, a la Suprema Corte, al voto libre y a la República. Las imágenes de las plazas públicas pintadas de rosa en la Ciudad de México y de manera simultánea en más de cien ciudades de todo el país y el mundo, son un hito histórico:
Hoy la Marea Rosa es un movimiento social en donde los ciudadanos encontraron un espacio para alzar la voz frente a un gobierno que no escucha, no dialoga y no quiere construir de la mano de toda la población.
Este 2024 se vivió el proceso electoral más inequitativo de la historia reciente. La contienda fue absolutamente asimétrica.
El oficialismo participó con todo el aparato del Estado. Para muestra de ello: el presidente fue reconvenido por la autoridad electoral en más de 40 ocasiones a no intervenir, a lo cual hizo caso omiso.
Lo que impactó el resultado de la elección no fueron las trampas de un día, sino los abusos de 5 años y medio.
Por el bien de México y su democracia, no debe repetirse nunca más una elección tan dispareja e injusta.
A pesar de ello, la derrota ha obligado a reflexionar, aprender y mejorar. También a exigir y actuar para salvaguardar la democracia y libertades y para que sean atendidas la pobreza, la desigualdad, la violencia y la injusticia.
Finalmente, se puntualiza que las seis organizaciones que conforman UNID@S -convocante de la Marea Rosa- proponen construir, entre todas y todos, un país en donde las palabras Libertad e Igualdad sean la brújula que guíe el camino. Desde la Marea Rosa se seguirá defendiendo, sin descanso ni tregua, las causas que dieron origen.
En el lado del PRI, el que se dijo aliado por la candidatura de Xóchitl Gálvez no dio los votos prometidos.
Y con todo un rollo de cuestionamiento por la inequidad electoral, la intromisión presidencial y delincuencial, finalmente salió que impugnará la elección presidencial pero que no irá por la anulación de los comicios presidenciales. ¿Y, entonces? Para joderse.
Un reporte del sitio Infobae da cuenta:
“El partido dirigido por Alejandro “Alito” Moreno busca que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) examine estas irregularidades y establezca un precedente relevante para evitar situaciones similares en futuros procesos electorales, asegurando la integridad de la elección”.
Es decir, “precedente” no anulación.
En el PAN, el dirigente nacional panista, Marko Cortés:
“El proceso fue una elección de Estado que se caracterizó por no contar con un piso parejo, por la intervención del Presidente de la República, la violencia e injerencia del crimen organizado y el uso del aparato del Estado para promover la candidatura de la coalición Sigamos Haciendo Historia”, señaló.
“…más allá de la diferencia del resultado electoral, Acción Nacional promovió un Juicio de Inconformidad, que tiene por objeto solicitar la nulidad de la elección, porque no podemos dejar de impugnar la elección presidencial, porque significaría validar una elección de Estado”.
En el PRI y en el PAN, ¿seguirán Alito y Marko? Ellos no perdieron.
Cuando desperté seguía el dinosaurio. Ye tenía a sus bebés abuelos.
Y Marea Rosa que anticipa no será partido.
Referencias:
–Infobae:
–CEN DEL PAN: