David Rojo
El silencio del gobernador Castro es asumido por el Congreso de Baja California Sur como línea política para no hacer nada sobre temas de interés y de preocupación social sobre la transparencia y buen manejo del erario público en tierras sudcalifornianas aún cuando pudiese implicar el sacrificio de bienestar social, incluso con la evidente exclusión del pueblo en magnos eventos como el Carnaval 2025 de La Paz, o de la aún ausencia de pronunciamientos de la legislatura sudcaliforniana contra presuntas irregularidades en el manejo del Presupuesto Municipal 2022 de Los Cabos por 2 mil millones de pesos.
Los reportes de la Auditoría Superior de Baja California Sur a la legislatura sudcaliforniana por lo del Presupuesto 2022 de Los Cabos tendrían que haber tenido un pronunciamiento desde octubre pasado. Y nada. En el ínter se cruzó el zape del Gobernador Castro al presidente municipal Christian Agúndez (2024-2027) por andar diciendo que del XIV Ayuntamiento cabeño (2021-2024) había recibido la peor administración municipal de Los Cabos y para que las cosas quedaran en claro en cuanto a las simpatías del mandatario estatal, mandó entonces a Leggs, ex presidente municipal cabeño, el abrazo público de carnal político.
La auditoría al Presupuesto 2022, entonces ha quedado en silencio y Christian carga ahora en contra hasta bloqueos carreteros brutales –sociedad contra sociedad– por el desabasto de agua potable en Cabo San Lucas.
Lo último que exhibe la sumisión del Congreso sudcaliforniano es una simple línea del Gobernador Castro en clara referencia a la presidenta municipal de La Paz:
“Hay que investigar, si es de corte privado tiene que responder ella (Milena Quiroga).
Y no ha habido respuesta.
Se trata del fondeo del gobierno municipal paceño al concierto de Chayanne del que fue excluido el pueblo, lo que dejó en evidencia la postura clasista de Quiroga.
Las simples palabras del Gobernador Castro anticipando un evento de posible corte privado ahí se quedaron, cuando en contrario en un documento público el gobierno municipal que preside Quiroga evidenció que el concierto de Chayanne se trataba de un evento municipal y por el cual de entrada se habían cubierto por anticipo 18 millones de pesos, la cifra coincide con el financiamiento estatal al gobierno municipal de Quiroga.
–¿Qué siguió por parte del Congreso al propio silencio de la simple línea del Gobernador dado que implica sólo un quizás al no haber una efectiva contundencia para una real y transparente investigación?
Pues, la respuesta siguió con la sumisión de la legislatura sudcaliforniana con el agregado de la internacional frase de aquel canto, “quizás, quizás, quizás”.
Y así nada de decir y actuar en contra de la exclusión del pueblo en magno evento de fiesta popular ni del destino de cuantiosos recursos municipales lo que en lugar de oscuridad debería tener un destino transparente y de pleno bienestar social.